
La celebración oficial se realizó el sábado 26 de enero en la Catedral de Budapest. Para la ocasión en Kazincbarcika, donde los salesianos animan una gran obra - con escuela en diferentes niveles y direcciones, internado y parroquia – ha llegado en un tren especial un gran número de estudiantes de las escuelas salesianas. Desde la estación accidental de Budapest los chicos han recorrido el camino que lleva a la catedral donde lanzaron cientos de globos con los colores nacionales y notas con las frases de Don Bosco.

En su homilía el Cardenal se centró en el valor de la obra salesiana, comprometida con la juventud pobre y abandonada, y destacó la importancia de la labor educativa realizada por los Hijos de Don Bosco, en particular en la formación profesional y la puesta en marcha de los artesanos, reafirmando el valor ético y moral de esta opción educativa.
En la jornada del domingo 27, don Bregolin, acompañado por don Bela y el Secretario Inspectorial, celebraron la Eucaristía en Péliföldszentkereszt, Casa Madre de los salesianos en Hungría. En su homilía, centrada en el mundo juvenil, el Vicario del Rector Mayor pidió educar a los jóvenes con el corazón de Don Bosco, cuidando de su desarrollo integral y promoviendo los derechos humanos, en particular los de los niños. Después de la celebración visitó la exposición interactiva sobre el centenario de la presencia salesiana, y por la tarde, celebró otra misa con la Familia Salesiana en la Casa Inspectorial.
El lunes 28 de enero, finalmente, don Bregolin se encontró con todos los salesianos de la inspectoría, para los cuales tuvo dos informes, uno sobre el Aguinaldo 2013 del Rector Mayor y otro sobre la fidelidad y la disciplina religiosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario