En España, el Gobierno atenta contra el Derecho a Vivir

Mientras la Organización de las Naciones Unidas prepara una fuerte ofensiva para imponer el aborto a nivel mundial, en España, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero está empecinado en atacar a la vida humana desde el momento mismo de su concepción en el seno materno, a deducir por las últimas políticas que ha impulsado su administración.
Hace poco días se legalizó la venta irrestricta (e irresponsable) de la píldora del día después y, en el día de hoy se conoció que Rodríguez Zapatero pretende legalizar el aborto en su país.

Respecto a la polémica píldora, el gobierno socialista intenta favorecer su consumo para, según la justificación oficial, reducir la gran cantidad de abortos por embarazos nos deseados en adolescentes y jóvenes españolas.

La acción de la controvertida del Levonorgestrel (LNG) o "píldora del día después" consiste en que una vez fecundado el óvulo (ya existe un ser humano), impide que se implante en el útero siendo expulsado por el cuerpo de la mujer sin que, en casi el 85% de los casos, ésta se entere en absoluto. Ahora, los mercaderes de la muerte han instalado en las sociedades la idea de que la píldora del día después no es abortiva, ya que "impide que el óvulo sea fecundado".

Rodríguez Zapatero y sus colaboradores dicen estar preocupados por la alta cantidad de "embarazos no deseados" y por eso es que toman esta medida. Lo cierto que no hay ningún estudio serio que avale que distribuir la "píldora del día después" no implica disminución en los casos de abortos, sino todo lo contrario.

Lo lamentable del caso es que, desde el Estado español, no se propone un debate serio y responsable con padres y educadores sobre sexualidad y afectividad para niños y adolescentes. Considero que lo importante es prevenir antes que lamentar y es por eso que es más efectivo ponernos a educar sobre moral a las generaciones que nos siguen.

En la República Argentina, decimos que estamos a favor de la vida humana desde el momento mismo de su concepción (lo sostiene la Constitución nacional) pero en la práctica la hipocresía es tal que en los centros de salud pública se reparte gratuitamente la píldora del día después, como así también se brinda asesoramiento gratuito "pre-aborto" y "pos-aborto".

Aborto "para todos"

El Diario Crítica Digital informó que el Consejo de Ministros de España aprobó el anteproyecto de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva que contempla el derecho al aborto libre hasta la semana 14 y hasta la 22 en situaciones específicas, según anunciaron la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, y la ministra de Igualdad, Bibiana Aído. La iniciativa, que deberá ser aprobada por el Parlamento, también permite a las adolescentes, a partir de los 16 años, abortar sin permiso paterno. Sustituirá la actual legislación vigente desde 1985, que sólo despenaliza la interrupción del embarazo en los casos de violación, grave malformación del feto y daño para la salud física o psíquica de la madre.

Medidas como ésta atentan contra la vida humana. Sin dudas.

Quienes están a favor del aborto no tienen fundamentos sólidos para sostener que "eso" que matan en el seno de una mujer es un ser humano. Solo se limitan al "derecho a decidir" que tendría la mujer embarazada como si el ser humano fuere quien dispone de la vida: ¿qué ser humano puede decidir cuando nacer y cuando no?, ¿qué ser humano puede evitar la muerte?.

Como dije en otras ocasiones, el hilo se termina cortando por lo más delgado. En este caso puntual, los desórdenes afectivos que se cometen los terminan pagando seres inocentes con su propia vida. A nadie le importa el derecho a vivir que esos pequeños tienen: ellos no tienen la culpa de las circunstancias en que vienen a este mundo... ni ellos ni nosotros pidieron nacer, solo nacen por gracia de Dios.

Elevemos nuestra oración por todos esos niños inocentes que matan día a día en todo el mundo, a los que privan de vivir. Vivimos en un mundo que Dios ha creado para todos, pero es la mezquindad de algunos la que hace que este mundo sea para pocos... no nos dejemos engañar.